Este Porsche había sido transformado previamente en un coche de carreras altamente modificado y no original. Se le devolvió su configuración original, con la particularidad de que la carrocería fue fabricada por «Karmann» en lugar de «Reutter», lo que provocó numerosas diferencias en los detalles de acabado.
La tarea de devolver el coche a su estado original fue un enorme trabajo de arqueología, salvando las piezas originales que aún quedaban y recreando las piezas faltantes, paneles o soportes retirados o dañados.
























































































































































































































